La realidad es que la mayor parte de los equipos no son todo lo eficiente que deberían ser y cada lustro será más complejo encontrar trabajadores ávidos de ganas para realizar los trabajos encomendados.
La verdad que es complejo potenciar a trabajadores cuyas necesidades están tan cubiertas en casi todos los sentidos y donde su mayor dificultad es sentir que no llegan a final de mes.
La mayoría de ellos no es por falta de recursos sino por falta de autogestión del gasto y sus deseos.